

Líderes indígenas del mundo piden el mismo peso que los jefes de Estado en COP30
Unos 8.000 indígenas de la Amazonía y Oceanía se reúnen en Brasilia desde este lunes para exigir que sus líderes tengan "igual voz y poder" que los jefes de Estado en la COP30 sobre cambio climático, que se celebra en noviembre en Brasil.
Con sus vestimentas tradicionales y pinturas corporales, unos 200 pueblos se presentaron al ritmo de maracas y tambores, levantando una polvareda a pocos kilómetros de las sedes de los poderes estatales brasileños.
Delegaciones de Bolivia, Colombia, Ecuador, Guyana, Guyana Francesa, Suriname y Venezuela, así como representantes de Australia, Fiji y otras naciones oceánicas, se sumaron este año al encuentro anual de los pueblos originarios brasileños, Campamento Tierra Libre.
Separados por decenas de miles de kilómetros, los pueblos de la Amazonía y de Oceanía comparten su vulnerabilidad al calentamiento global.
"Exigimos que los líderes de las comunidades indígenas y locales tengan igual voz y poder que los jefes de Estado en la COP30, con la misma legitimidad, poder de decisión y respeto que las representaciones de los países", afirmó la jefa indígena brasileña Alana Manchineri en una declaración conjunta de los pueblos asistentes.
Los pueblos originarios también demandan "financiación directa" para preservar la naturaleza y "compensación por el daño" que sufren.
- Causa común -
Los asistentes hicieron travesías de varios días en aviones desde remotas islas del Pacífico o en botes y autobuses desde lo profundo de la Amazonía para asistir a un encuentro que se prolongará hasta el viernes.
"En el Pacífico tenemos dificultades únicas. Pero también queremos estar aquí y mostrarle a la gente indígena en la Amazonía que podemos luchar" juntos, dijo a la AFP Alisi Rabukawaqa, representante de Fiji.
El aumento en los niveles del mar amenaza la existencia de islas oceánicas como Fiji.
"Hay agua salada entrando en las tierras donde sembramos nuestra comida", alertó Rabukawaqa, de 37 años.
En Sudamérica una sequía histórica el año pasado desató una ola de incendios forestales que arrasó casi 18 millones de hectáreas de selva amazónica solo en Brasil, según la plataforma de monitoreo MapBiomas.
"Para mí sería importante que a la COP30 invitaran a los caciques espirituales (indígenas) y no a los líderes que están en la ciudad. Porque los líderes que están en la aldea son quienes conocen las grandes dificultades que enfrenta la cuestión climática", afirmó Sinesio Trovao, jefe de la aldea Betania Mecurane, en la Amazonía brasileña.
- "Acción tangible" -
La presidencia brasileña de la COP30 anunció la creación de un "Círculo de Líderes indígenas" para asegurarse que los pueblos originarios sean escuchados durante la conferencia de la ONU contra el calentamiento global, que se celebrará entre el 10 y el 21 de noviembre en Belém (norte).
"Queremos ver eso en acción, queremos ver cómo se puede hacer tangible", agregó Rabukawaqa.
Bajo la consigna "La respuesta somos nosotros", el campamento incluirá varias marchas por la emblemática Explanada de los Ministerios, conversatorios y eventos culturales. El martes los indígenas participarán en una "sesión solemne" en el congreso brasileño.
Los pueblos originarios también comparten su oposición a la explotación de combustibles fósiles, la principal causa del calentamiento global y cuyo principio para un abandono progresivo se adoptó en la COP28.
La presidencia brasileña ha evitado hasta ahora sentar posición frente a los combustibles fósiles, asunto espinoso en las cumbres anteriores.
Brasil es el mayor productor de petróleo de América Latina y el presidente Luiz Inácio Lula da Silva presiona para avanzar en la perforación de una zona marina a unos 500 kilómetros de la desembocadura del río Amazonas.
La iniciativa ha provocado el rechazo de varios líderes indígenas afines a Lula, incluido el emblemático cacique Raoni, así como de organizaciones ambientalistas.
E.Goossens--JdB