Trump revoca amparo migratorio para venezolanos y evalúa enviar migrantes a Guantánamo
Donald Trump revocó este miércoles un amparo que evitaba a más de 600.000 venezolanos ser expulsados de Estados Unidos y considera enviar a migrantes en situación irregular a la prisión militar de Guantánamo, normalmente reservada para presos acusados de terrorismo.
"Firmaré hoy un decreto ordenando a los departamentos de Defensa y Seguridad Interior que comiencen a preparar las instalaciones para 30.000 migrantes en la bahía de Guantánamo", una base militar estadounidense en Cuba, dijo, y aseguró que enviará a "criminales" en situación irregular.
Algunos "son tan malos que ni siquiera confiamos en que los países los retengan, porque no queremos que regresen", acusó. Es un "lugar del que es difícil salir".
Han pasado por ella cientos de prisioneros, incluidos algunos miembros de Al Qaida, pero, según el New York Times, también se ha utilizado durante décadas para encarcelar a algunos migrantes interceptados en el mar.
Es polémica por sus extremas condiciones de detención. Basándose en testimonios algunas asociaciones denuncian que se vigila a los migrantes cuando llaman a un abogado, les obligan a ponerse gafas de sol durante el transporte y está llena de ratas.
Trump hizo el anuncio en la Casa Blanca, donde ratificó la primera ley antimigratoria de su segundo mandato, la cual exige detener de forma automática a los migrantes en situación irregular acusados de algunos delitos, incluido el robo.
La ley lleva el nombre de Laken Riley, una estudiante de enfermería de 22 años asesinada por un venezolano en situación irregular que era buscado por robar en tiendas. Fue condenado a cadena perpetua.
- "Esta basura fuera" -
Pocas horas antes la secretaria de Seguridad Inrerior, Kristi Noem, anunció en Fox News que se ha revocado la extensión del amparo migratorio para los venezolanos decidida por expresidente Joe Biden poco antes de dejar el cargo.
"Los habitantes de este país quieren esta basura fuera. Quieren que sus comunidades estén seguras", declaró.
"Hemos parado eso" y "vamos a seguir el procedimiento y evaluar a todos estos individuos que están en nuestro país", insistió.
El 10 de enero, coincidiendo con la investidura presidencial de Nicolás Maduro en Caracas, la administración demócrata prolongó el Estatus de Protección Temporal (TPS) por 18 meses para los venezolanos, desde el 3 de abril de 2025 hasta el 2 de octubre de 2026.
Alegó "la grave emergencia humanitaria que el país continúa enfrentando por las crisis políticas y económicas bajo el inhumano régimen de Maduro".
El TPS es un programa establecido por el Congreso para ciudadanos extranjeros que no pueden regresar de manera segura a su país debido a desastres naturales, conflictos armados u otras condiciones extraordinarias.
Según el Pew Research Center, hasta marzo de 2024 había 1,2 millones de personas elegibles para el TPS o que se habían beneficiado del programa, siendo los venezolanos el grupo más grande.
Las medidas anunciadas el miércoles "nos acercarán un paso más a erradicar de una vez por todas el flagelo de la delincuencia migratoria en nuestras comunidades", afirmó Trump.
Acabó con el permiso de permanencia temporal concedido a migrantes de Venezuela, Cuba, Haití y Nicaragua que tengan a un patrocinador en Estados Unidos, pero también con la aplicación de teléfono móvil CBP One que permitía pedir cita para entrar legalmente.
Eso además de restablecer su programa "Quédate en México", implementado en su primer mandato (2017-2021) y por el que los migrantes esperan el desenlace del proceso migratorio del otro lado de la frontera.
El republicano ha ordenado redadas de migrantes, algunos de los cuales envió en aviones militares con grilletes, exponiéndose a tensiones diplomáticas con varios países como Brasil y Colombia.
- Retórica antimigrante -
Trump prometió expulsar primero a los migrantes en situación irregular con antecedentes penales pero el martes la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, afirmó que consideran "criminal" a todo aquel que haya entrado "ilegalmente en Estados Unidos".
Muchos de estos migrantes son latinoamericanos que han huido de la pobreza y la violencia.
Las organizaciones de defensa de los migrantes y los demócratas han puesto el grito en el cielo, pero Noem los acusa de querer encubrir a las pandillas y de estar "completamente desconectados de la gente".
D.Verstraete--JdB