Journal De Bruxelles - Trump recibe a Bukele para afianzar su bromance y blindar el pacto migratorio

Trump recibe a Bukele para afianzar su bromance y blindar el pacto migratorio
Trump recibe a Bukele para afianzar su bromance y blindar el pacto migratorio / Foto: Handout - Oficina de Prensa de la Presidencia de El Salvador/AFP

Trump recibe a Bukele para afianzar su bromance y blindar el pacto migratorio

Donald Trump recibe este lunes en la Casa Blanca a su mejor amigo en América Latina, el presidente salvadoreño Nayib Bukele, una pieza clave desde que se prestó a encarcelar a cambio de dinero a migrantes expulsados de Estados Unidos.

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Cada vez que un periodista menciona a Bukele el presidente estadounidense y miembros de su gabinete se deshacen en elogios.

En su plataforma Truth Social el republicano afirmó este fin de semana que lo espera "con ansia".

"El presidente Bukele ha aceptado con generosidad bajo su custodia a algunos de los enemigos extranjeros más violentos del mundo", escribió.

Desde mediados de marzo el magnate ha expulsado al país centroamericano a más de 250 migrantes, la gran mayoría venezolanos, invocando la Ley de enemigos extranjeros de 1798 que hasta entonces solo se había usado en tiempos de guerra.

Los últimos 10 llegaron este fin de semana, según el jefe de la diplomacia estadounidense Marco Rubio.

Por el primer grupo de más de 200 Washington pagó "aproximadamente seis millones de dólares", según la Casa Blanca. Lo que cuesta recluirlos en una megacárcel con muy mala fama por incumplir los estándares de derechos humanos.

Las deportaciones abrieron un frente judicial debido a que Washington acusa a los migrantes de pertenecer a la organización criminal venezolana Tren de Aragua o a la pandilla MS-13 sin aportar pruebas.

Hasta el momento el gobierno reconoció haber expulsado al salvadoreño Kilmar Ábrego García por un "error administrativo" pero da largas a los jueces que le piden que lo traiga de vuelta.

- "Presidente B" -

El futuro de los expulsados "depende del presidente B y su gobierno", declaró Trump en su plataforma.

Hay confianza en el trato. El dirigente de la primera potencia mundial llama "presidente B" a Bukele, quien en su día se describió como un "dictador cool" para defenderse de quienes lo acusan de autoritarismo.

En su cuenta de la red social X, la secretaría de prensa de la presidencia salvadoreña presume de que El Salvador se posiciona como "un aliado estratégico" de Estados Unidos en Centroamérica.

Será el primer presidente latinoamericano en pisar el despacho oval de la Casa Blanca en el segundo mandato de Trump, que ha recibido a otros pero en su residencia privada de Florida.

El encuentro se celebra en medio del huracán arancelario de Trump, del que no se ha librado El Salvador. Paga el 10% mínimo universal impuesto por Washington a todos sus socios para reducir el déficit comercial, sanear las finanzas públicas y relocalizar muchas actividades industriales.

Estados Unidos es el principal destino de las exportaciones salvadoreñas, sobre todo de ropa, condensadores eléctricos, azúcar y café, según el Banco Central de El Salvador.

Los 2,5 millones de salvadoreños que viven en Estados Unidos son un sostén para la economía de su país por las remesas que envían.

El Salvador recibió 8.480 millones de dólares en remesas familiares en 2024, el 23% del PIB del país.

En enero y febrero las remesas crecieron 14,2% en relación a los mismos meses de 2024, debido al temor a las deportaciones de migrantes, según los economistas.

Aunque Trump prometió deportaciones masivas de migrantes en situación irregular, El Salvador parece disfrutar de un trato de favor.

El millonario acabó con programas humanitarios para migrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela y con el Estatus de Protección Temporal o TPS para venezolanos.

- Del nivel 2 al 1 -

Pero el TPS para los salvadoreños sigue en pie a pesar de ser un amparo para extranjeros que no pueden regresar de manera segura a su país y según Washington El Salvador es ultraseguro.

Tanto es así que este mes el Departamento de Estado lo pasó del nivel 2, que compartía con países como España o Francia, al 1, el mejor, un guiño para la industria turística salvadoreña.

Una prueba más de que atrás quedó el recelo del gobierno del expresidente demócrata Joe Biden hacia el país centroamericano.

Y.Callens--JdB