La filial peruana hace caer los beneficios de Telefónica en el tercer trimestre
La gran empresa de telecomunicaciones española Telefónica confirmó este jueves sus objetivos financieros para 2024, pese de una fuerte caída de sus beneficios en el tercer trimestre del año, principalmente por el ajuste contable del valor de su filial peruana.
El beneficio neto del operador español, presente en nueve países latinoamericanos, se situó en 10 millones de euros (10,7 millones de dólares) entre julio y septiembre, un 98% menos que los 502 millones del tercer trimestre de 2023.
Durante los nueve primeros meses del año, el grupo generó 989 millones de euros (1.060 millones de dólares) de beneficio neto, un 21,7% menos que los 1.260 millones de euros obtenidos en el mismo período de 2023, según los resultados publicados el jueves.
Esta fuerte caída se explica por la actualización del valor de su filial peruana, con un impacto negativo de 314 millones de euros (338 millones de dólares), y por la depreciación de varias monedas latinoamericanas, incluido el real brasileño, frente al euro.
"La depreciación de las divisas ha causado un impacto trimestral de 429 millones de euros en los ingresos" en el tercer trimestre, que descendió un 2,9%, a 10.200 millones de euros (casi 11.000 millones de dólares).
Pese a esto, Telefónica confirmó "todos sus objetivos financieros" para 2024, con el crecimiento de su facturación del 1%, y precisó que mantendrá la retribución prevista para sus accionistas este año.
"Nuestro plan de acción (...) es ambicioso y continúa dando resultados para avanzar en la dirección correcta y consolidar un crecimiento rentable", afirmó en el comunicado el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete.
Los resultados no convencieron a los inversionistas y la acción de Telefónica bajaba un 3,64% en una Bolsa de Madrid en ligero ascenso (0,39%) a las 08H40 GMT.
El grupo precisó que actualmente ofrece "393 millones" de accesos a internet y teléfono, es decir, un 2% más en un año, gracias a la aceleración de la actividad comercial en sus mercados clave, en particular en España, donde ha ganado muchos clientes.
Estos resultados llegan en medio de la reestructuración del mercado de las telecomunicaciones en España, con la fusión de Orange y MásMóvil, que incrementó la competencia en el país, y la venta de Vodafone España al fondo británico Zegona.
Ante su fuerte deuda, Telefónica inició hace unos años un importante cambio estratégico al reorientarse en sus cuatro mercados principales (España, Alemania, Reino Unido y Brasil) para mejorar su rentabilidad.
La gran empresa de telecomunicaciones española también inició a finales del año pasado un recorte de su plantilla, con 3.400 supresiones de empleo de los 16.500 que tiene en España.
S.Lambert--JdB