Poner fin al fact-checking causaría un "auténtico daño" en el mundo, advierte red de verificadores
Terminar con la regulación de contenidos en Facebook e Instagram causaría un "auténtico daño" en el mundo, especialmente en países vulnerables a la desinformación, advirtió una red global de verificadores, refutando las declaraciones del jefe de Meta, Mark Zuckerberg, de que el fact-checking aumenta la censura.
Meta anunció el martes la decisión de poner fin a su programa de verificación de información en Estados Unidos, una decisión que alarma también a la ONU.
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, sostuvo este viernes que "autorizar los discursos de odio y los contenidos dañinos en internet tiene consecuencias en el mundo real. Reglamentar estos contenidos no es censura".
A la vez, Türk hizo una llamado "a la responsabilidad y a la gobernabilidad del espacio digital, en apego con los derechos humanos".
- Vulnerables a la desinformación -
Aunque la decisión de Meta sólo se aplica actualmente a Estados Unidos, la red internacional de verificadores de informaciones IFCN (International Fact-Checking Network) advirtió del impacto potencialmente devastador que tendría si el grupo de Zuckerberg pusiera fin a su programa en todo el mundo, presente en más de 100 países.
"Algunos de estos países son muy vulnerables a la desinformación, que estimula la inestabilidad política, la injerencia electoral, la violencia popular e incluso el genocidio", declaró la alianza que agrupa 137 organizaciones, entre ellas la AFP.
"Si Meta decide detener el programa en todo el mundo, es casi seguro que causará un auténtico daño en muchos lugares", añadió.
Al anunciar su decisión, Zuckerberg afirmó que los verificadores "han estado demasiado politizados y contribuyeron a reducir la confianza más que a mejorarla, especialmente en Estados Unidos".
"Es falso y queremos restablecer la verdad, tanto para el contexto actual como para la historia", replicó la red.
- Libertad de expresión -
Según Zuckerberg, con la decisión Meta busca "restaurar la libertad de expresión en sus plataformas" y reemplazará la tarea de los verificadores por un sistema de notas comunitarias similares a las que utiliza la red X.
El gobierno demócrata del saliente presidente estadounidense, Joe Biden, se negó este viernes a comentar el anuncio, al asegurar que las redes sociales "hacen sus propias reglas" sobre la moderación de contenidos.
"Cuando una empresa toma una decisión... no vamos a hacer comentarios", dijo a los periodistas la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre.
La medida llega, además, a dos semanas de que el magnate republicano Donald Trump asuma nuevamente la presidencia.
En los últimos años, los republicanos, así como Elon Musk, dueño de la red X (antes Twitter) y muy cercano a Trump, se han quejado de los programas de verificación de información al considerarlos como una "censura".
Luego de haber eliminado la cuenta de Trump en Facebook en 2021, a raíz del ataque contra el Capitolio -sede del Congreso- por parte de una multitud de sus seguidores, Zuckerberg hizo reiterados gestos de acercamiento hacia el presidente electo: cenó con él en noviembre, donó un millón de dólares para su ceremonia de investidura el 20 de enero y nombró a varios de sus aliados para puestos clave en el grupo.
La Agence France-Presse (AFP) trabaja con el programa de verificación de contenidos de Facebook en 26 idiomas. Facebook paga para usar las verificaciones de unas 80 organizaciones a nivel global en su plataforma, así como en las plataformas WhatsApp e Instagram.
E.Carlier--JdB