El Kremlin niega cualquier responsabilidad sobre el accidente de avión azerbaiyano
El Kremlin se negó de nuevo este jueves a admitir cualquier responsabilidad en el accidente de un avión de Azerbaijan Airlines ocurrido a finales de diciembre, a pesar de la insistencia de Bakú, que sostiene que el aparato fue derribado por disparos rusos.
Moscú no desmiente ni confirma esta versión de los hechos, lo que intensifica el malestar de Azerbaiyán, un país del Cáucaso aliado de Rusia.
La tragedia se cobró la vida de 38 personas.
Preguntado sobre las acusaciones azerbaiyanas, el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, evitó responder directamente y se limitó a decir que espera que se lleve a cabo una "investigación objetiva e imparcial".
"Nos interesa que se realice una investigación completamente objetiva e imparcial para determinar las causas de esta catástrofe", declaró a la prensa, asegurando que especialistas rusos proporcionaban "la asistencia necesaria" para las pesquisas.
El avión realizaba el 25 de diciembre la ruta entre Bakú y Grozni, capital de la república rusa de Chechenia, en el Cáucaso, pero se estrelló cerca de Aktau, en Kazajistán, lejos de su destino original.
El presidente azerbaiyano, Ilham Aliyev, afirmó a finales de diciembre que el avión había sido alcanzado por "disparos" sobre territorio ruso. Acusó a Moscú de intentar ocultar su responsabilidad y exigió disculpas públicas, además de compensaciones.
Esta semana Aliyev redobló sus acusaciones asegurando que "la responsabilidad por la muerte de ciudadanos azerbaiyanos recae en representantes de Rusia".
A finales de diciembre, el presidente ruso, Vladimir Putin, presentó sus disculpas a Aliyev y reconoció que las fuerzas de defensa antiaérea rusas efectuaron disparos el día del accidente debido a un ataque de drones ucranianos.
Sin embargo no admitió que Moscú fuese responsable del siniestro.
La fiscalía de Azerbaiyán afirmó que Rusia prometió identificar y castigar a las personas involucradas en el incidente.
Las cajas negras del avión fueron examinadas en Brasil, donde se encuentra su fabricante, Embraer, y posteriormente enviadas de regreso a Kazajistán.
Según las autoridades brasileñas el análisis de los datos extraídos y la publicación del informe final de la investigación son ahora responsabilidad de las autoridades kazajas.
Y.Niessen--JdB